Palomar by Italo Calvino

Palomar by Italo Calvino

autor:Italo Calvino [Calvino, Italo]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Fantástico, Humor, Sátira
editor: ePubLibre
publicado: 1983-01-01T05:00:00+00:00


Palomar hace las compras

Un kilo y medio de grasa de ganso

La grasa de ganso se presenta en frascos de vidrio, cada uno de los cuales contiene, según reza un rótulo escrito a mano: «Una pata y un ala de ganso cebado, grasa de ganso, sal y pimienta. Peso neto: un kilo quinientos gramos». En la espesa y suave blancura que colma los frascos se atenúa el estridor del mundo; una sombra parda sube del fondo y como en la niebla del recuerdo deja transparentar los miembros sueltos del ganso, desvanecido en su grasa.

El señor Palomar hace la cola en una charcuterie de París. Son las fiestas, pero aquí la multitud de clientes es habitual aun en épocas menos canónicas, porque es uno de los buenos negocios gastronómicos de la ciudad que ha sobrevivido milagrosamente en un barrio donde el achatamiento del comercio de masas, los impuestos, los bajos ingresos de los consumidores y ahora la crisis, han desmantelado una por una las viejas tiendas sustituyéndolas por anónimos supermercados.

Mientras espera en fila, el señor Palomar contempla los frascos. Trata de encontrar en sus recuerdos un lugar para el cassoulet, pingüe estofado de carne y alubias en el que la grasa de ganso es un ingrediente esencial; pero ni la memoria del paladar ni la cultural le son de ayuda. Y sin embargo el nombre, la visión, la idea lo atraen, despiertan un instantáneo fantaseo no tanto de la gula como del eros: de una montaña de grasa de ganso aflora una figura femenina, untada de blanco la piel rosada y él ya se imagina a sí mismo abriéndose paso en su dirección entre esos densos aludes y abrazándola y hundiéndose con ella.

Rechaza el pensamiento incongruente, alza la mirada al cielorraso empavesado de salamis que cuelgan en guirnaldas navideñas como frutos en las ramas del país de cucaña. Todo alrededor, en los estantes de mármol, la abundancia triunfa en las formas elaboradas de la civilización y del arte. En las tajadas de paté de venado las carreras y los vuelos de las landas se fijan para siempre y se subliman en un tapiz de sabores. Las galantinas de faisán se extienden en cilindros gris rosado coronados, para probar la autenticidad del propio origen, por dos patas de ave como garras protuberantes en un blasón heráldico o un mueble renacentista.

A través de las envolturas de gelatina asoman los grandes lunares de trufas negras alineados como botones en la casaca de un Pierrot, como notas de una partitura, constelando los rosados, abigarrados arriates de los patés de foie gras, de las sobrasadas, de las terrinas, las galantinas, los abanicos de salmón, los corazones de alcachofa guarnecidos como trofeos. El motivo conductor de las rodajas de trufa unifica la variedad de las sustancias como el negro de los trajes de gala asomando en un baile de máscaras, y certifica el atavío festivo de los manjares.

Gris y opaca y agria es en cambio la gente que se abre paso entre los mostradores, separada de las dependientas vestidas de blanco, más o menos viejas, de brusca eficiencia.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.